Para todas las personas que siguen un tratamiento para el colesterol alto o tienen otros factores de riesgo de enfermedad cardíaca.
Determinar si su nivel de glucosa en sangre está en un rango saludable. Investigar, diagnosticar y controlar la hiperglucemia, la hipoglucemia, la diabetes y la prediabetes.
Para el cribado y seguimiento de muchos trastornos, por ejemplo, la anemia. ¿Cuándo hacerlo? Como parte de una evaluación clínica de rutina o cuando lo solicite el médico.
Existen diferentes tipos de pruebas del VIH, y es posible detectar anticuerpos, antígenos o ARN en suero, plasma, fluido oral, mancha de sangre seca u orina. Las pruebas van desde la detección de anticuerpos en la saliva hasta el ARN del virus en la sangre, variando el coste y la precisión del resultado.
La hepatitis se refiere a cualquier degeneración del hígado debida a diferentes causas, siendo las más frecuentes las infecciones por virus de tipo A, B y C y el abuso de alcohol u otras sustancias tóxicas (como algunos medicamentos).
Las pruebas más adecuadas para evaluar la salud de la próstata son el tacto rectal y el análisis de sangre para el PSA, que deben realizarse cada año todos los hombres mayores de 50 años. Cuando se encuentran alteraciones en estos 2 exámenes, el médico puede solicitar otros como la medición del chorro de orina, la ecografía transrectal, la prueba de orina PCA3 y la biopsia, que se solicitan según las necesidades de cada persona.
Los Laboratorios Clínicos ofrecen análisis completos de sangre, heces y orina. Pruebas específicas y detalladas de colesterol, presión arterial, tiroides, enfermedades venéreas, diabetes, anemia, artritis, nutricionales, ovarios, hormonales, H Pylori, hepatitis, VIH, testosterona y próstata entre muchas otras.